Tienes mucha suerte y no lo sabes.
Tienes mucha suerte y no lo sabes. No lo sabes porque, en realidad, nunca has tenido mala suerte y así es muy difícil comparar. Eres feliz y no lo sabes. No lo sabes porque, en realidad, nunca has sido infeliz y así es muy difícil comparar. La confusión probablemente empieza en la…